¿Qué fue lo que paso?
Distinguir entre actitudes y aptitudes.
Puede que las personas que no consiguen alcanzar sus metas o que abandonan con cierta prontitud sus objetivos se pregunten qué fue lo que les paso a pesar de haber puesto toda la carne en el asador como se suele decir.
Bien, una de las posibles causas es que tal vez esa persona se olvidó tener en cuenta un detalle fundamental; ¡ conocer y saber valorar su propia madurez emocional!. Sufrir de un desequilibrio entre las aptitudes y las actitudes emocionales resulta más habitual de lo que puede parecer a simple vista.
A menudo ignoramos que uno de los mayores dramas del ser humano es la lucha por convertirse en un adulto inteligente y conocedor, para luego morirse sin haber madurado emocionalmente llegando a su fin de vida como un niño herido.
Esto lo podemos observar en las personas que van por la vida perdiendo o destruyendo relaciones sin ni siquiera plantearse por un momento el revisar su actitud, ya que están convencidos de que la responsabilidad por no poder alcanzar sus metas o por no disfrutar de la relación como a ellos les gustaría es siempre de los demás.
Para que una persona desarrolle sus competencias, es necesario que exista un equilibrio entre Actitud y Aptitud, ya que solo así será capaz de poner en marcha de forma integrada aquellos conocimientos adquiridos ( aptitud ) y rasgos personales que le permitirán resolver situaciones diversas en la vida (actitud ).
Yo pienso que para ello es muy importante conocer nuestro lenguaje interno. Como nos hablamos y nos vemos a nosotros mismos sin falsetes ni espejos rotos. No hablo de fustigarse o de emitir auto-juicios destructivos, hablo de ser capaces de reconocer nuestras propias carencias actitudinales. Si somos conscientes de ello, estaremos preparados para buscar las herramientas necesarias de reflexión para conocernos más y mejor a nosotros mismos.
Creo que cuando una persona logra la armonía interior, se solucionan sus problemas, anhelos y temores que pudiera tener. Es la única forma que yo conozco para descubrir el sentido de nosotros mismos y de nuestra propia vida. La comprensión de lo que somos, de nuestra verdad es un camino para salir del sufrimiento y del temor al fracaso.
Tú decides!